Crónicas desde orilla y/o embarcadas.

martes, 30 de julio de 2013

Cierre de temporada

Como ya he dicho en otras ocasiones por la red, los meses de verano en Las Canarias están monopolizados por los vientos alisios, los cuales suelen soplar con fuerza e imposibilitan por lo general la pesca embarcada. Solo el suroeste de las islas de mayor relieve queda abrigado de las intensas corrientes de aire, siendo factible por consiguiente salir de puerto. Sin embargo estas aguas están altamente presionadas y tener una jornada positiva es casi una quimera. Por tanto y al menos en mi caso prefiero esperar a que la componente sea más favorable.

No es que pueda decirles que la temporada haya sido estupenda, no. No obstante he conseguido anotar en mi casillero algún animalillo deseado y además he logrado en la medida de lo posible obtener fruto en la mayoría de las jornadas. No hemos (refiriendome también a Alberto) podido intentarlo en tantas ocasiones como hubiéramos deseado, pero tampoco sería correcto decir que probáramos solo de vez en cuando.

Aquí vemos al Capi con una de las innumerables sierras que se ha marcado.


Aunque no es veterano en el gobierno de embarcaciones consigue colocarnos siempre en las zonas apetecibles de forma idónea, sin tener nada que envidiar a otros más curtidos, y esta pericia me brinda oportunidades que no dejo escapar.






Y como captura destacada este pejerrey de 9Kg.


Mil gracias Capi.

También hubo tiempo para visitar a David y Adal, y como no, para probar suerte.

El de Tegueste embarcó un jurel mayúsculo.


Yo mojé con alguna plumilla y poco más.


Y para finalizar alguna fotillo más de la temporada.

Loquillo.



Listado.



Un buen jurel.



Y un peto estupendo.


Hasta la próxima.