No hace tanto, charlaba con un buen amigo y entre otras cosas me decía que estaba saturado de capturar sierras, que "no las quería ni ver". Seguramente, muchos de ustedes dirán que este colega es un hipócrita, que eso que cuenta no es real. Pero si yo les dijera que lo que sí es real es que este chico apresó entre 70 y 90 de estos túnidos durante los 4 o 5 primeros meses de este año que pronto acabará, parece que su pensamiento se hace más plausible.
Por otro lado, todos sabemos que cuando hablamos de pesca hay temporadas en que se captura más y otras en las que te cuesta horrores trincar cualquier bicho. Rachas favorables y asimismo adversas y claro, como es razonable, este spinner también está expuesto a estos altibajos y permaneció un tiempo sufriendo jornadas digamos, poco productivas, aunque fue raro que no tuviera sus ocasiones.
Estos días tengo una nueva conversación con el susodicho y muy animado me comenta que de una vez por todas ha expirado ese lapso negativo que venía padeciendo y paradójicamente, le pude ver radiante en una instantánea con una sierra notable entre sus manos.
Dicho esto, puedo decirles que me siento muy identificado con este muchacho, que yo mismo he tenido momentos en que he desestimado la captura de estos peces y que posteriormente y tras echarles de menos, me he alegrado mucho al volver a atraparles.
La sierra, un pez magnífico, incansable, deportivo, el cual está llenando de gratas sensaciones mis escapadas más recientes.


En el futuro no sé si vendrán muchas o pocas sierras, lo que si sé es que siempre serán bienvenidas.
Saludos.